Via Lactea

Via Lactea

La Via Lactea

El Sistema Solar esta en uno de los brazos de la espiral, a unos 30.000 años luz del centro y unos 20.000 del extremo.

La Vía Láctea es una galaxia grande de espiral y puede tener unos 100.000 millones de estrellas, entre ellas El Sol. En total tiene unos 100.000 años luz de diámetro y tiene una masa de mas de dos billones de veces la del Sol.

Cada 225 millones de años el Sistema Solar completa un giro alrededor del centro de la galaxia. Se mueve a unos 270 km por segundo.


jueves, 29 de noviembre de 2012

Planeta Jupiter


El planeta Júpiter se dejó ver esta madrugada 



Es un raro e impactante fenómeno astronómico, y ha podido observarse con toda nitidez en toda Sudamérica durante la pasada madrugada. Un extraño punto luminoso al lado de la luna.

domingo, 18 de noviembre de 2012

Asteroides y Riesgo de Impacto


Un asteroide es un cuerpo rocoso, carbonáceo o metálico más pequeño que un planeta y mayor que un meteoroide, que orbita alrededor del Sol en una órbita interior a la de Neptuno.

La mayoría de los asteroides de nuestro Sistema Solar poseen órbitas semiestables entre Marte y Júpiter, conformando el llamado cinturón de asteroides, pero algunos son desviados a órbitas que cruzan las de los planetas mayores.

El 1 de enero de 1801 el astrónomo siciliano Giuseppe Piazzi descubrió el asteroide o planeta menor Ceres, mientras trabajaba en un catálogo de estrellas. Este planeta menor fue denominado Ceres Ferdinandea en honor al entonces rey de las Dos Sicilias, Fernando I. Actualmente Ceres no es considerado un asteroide sino un planeta enano.

Al descubrimiento de Piazzi le siguieron otros parecidos pero de objetos más pequeños. Hoy se estima que existen cerca de dos millones de asteroides con un diámetro mayor que un kilómetro tan sólo en el cinturón principal; sin embargo, si se suman todas sus masas el total equivale sólo al 5% de la masa de la Luna.

Desde la redefinición de planeta de 2006 llevada a cabo por la Unión Astronómica Internacional, el término clásico asteroide no desaparece sino que se incluye dentro de los denominados cuerpos menores del Sistema Solar (excepto Ceres, que se considera planeta enano), junto con los cometas, la mayoría de los objetos transneptunianos y cualquier otro sólido que orbite en torno al Sol y sea más pequeño que un planeta enano.

Riesgo de impacto con la Tierra:


Bajo ciertas condiciones sería posible un impacto con nuestro planeta. Si consideramos a los cometas, meteoritos, asteroides, etc; los cuales son objetos con gran poder destructor, a estos objetos se llama Objetos Cercanos a la Tierra, en inglés Near Earth Objects (NEO).

Actualmente existen unos 4000 objetos catalogados como NEO, según (Near Earth Objects - Dynamic Site), un proyecto de la Universidad de Pisa que proporciona información actualizada de este tipo de astros. Finalmente, si un NEA se aproxima a menos de 0,05 unidades astronómicas (7 millones y medio de kilómetros) a la Tierra, se le denomina PHA (asteroide potencialmente peligroso, por sus siglas en inglés). De ellos hay clasificados unos 800 en la actualidad y son los que representan un peligro para la civilización si en verdad alguno llegara a chocar contra nuestro planeta, ya que afectaría de manera global al mismo. Sin embargo, los cálculos de las trayectorias y de cada aproximación a la Tierra tienen grandes incertidumbres, debido a que los elementos orbitales (semiejes mayor y menor, distancia mínima al Sol, excentricidad, entre otros) no se conocen con total precisión, de manera que cualquier predicción está sujeta a un margen de error considerable.

Estrellas


Aunque la mayor parte del espacio que podemos observar está vacío, es inevitable que nos fijemos en esos puntitos que brillan. No es que el espacio vacío carezca de interés. Simplemente, las estrellas llaman la atención.

A causa de la atracción gravitatoria, la materia de las estrellas tiende a concentrarse en su centro. Pero eso hace que aumente su temperatura y presión. A partir de ciertos límites, este aumento provoca reacciones nucleares que liberan energía y equilibran la fuerza de la gravedad, con lo que el tamaño de la estrella se mantiene más o menos estable durante un tiempo, emitiendo al espacio grandes cantidades de radiación, entre ellas, por supuesto, la luminosa.

Sin embargo, dependiendo de la cantidad de materia reunida en un astro y del momento del ciclo en el que se encuentra, se pueden dar fenómenos y comportamientos muy diversos. Enanas, gigantes, dobles, variables, cuásares, púlsares, agujeros negros.

Video de un objeto volador no indentificado absorviendo la energia del sol

martes, 13 de noviembre de 2012

Misterios Inexplicables del Universo

Agujeros Negros


Un agujero negro u hoyo negro es una región finita del espacio en cuyo interior existe una concentración de masa lo suficientemente elevada para generar un campo gravitatorio tal que ninguna partícula material, ni siquiera la luz, puede escapar de ella. Sin embargo, los agujeros negros pueden ser capaces de emitir radiación de rayos X.


Se conjetura que en el centro de la mayoría de las galaxias, entre ellas la Vía Láctea, hay agujeros negros supermasivos.  La existencia de agujeros negros está apoyada en observaciones astronómicas, en especial a través de la emisión de rayos X por estrellas binarias y galaxias activas.

Campo de Estrellas NGC 6362



El Observatorio Europeo Austral dio a conocer una nueva imagen del cúmulo globular NGC 6362, un campo de estrellas poco conocido situado en la constelación de Ara formado por decenas de miles de estrellas muy viejas y otras de aspecto sorprendentemente joven.

La imagen, que fue tomada con el Wide Field Imager (WFI) en el Observatorio La Silla de ESO, en el norte de Chile, permite divisar numerosas estrellas que se formaron hace unos 10.000 millones de años y que se han convertido ya en viejos asteroides gigantes rojos.

Sin embargo, el cúmulo alberga también estrellas azules y más luminosas, aparentemente más jóvenes, que deberían haberse apagado junto a sus compañeras.

Los astrónomos han estudiado este fenómeno durante años y manejan dos teorías: que son estrellas que se forman por colisión y fusión entre ellas o que se crean a partir de una transferencia de material entre dos estrellas compañeras.

Ambos planteamientos comparten la idea básica de que estas estrellas aparentemente más jóvenes no nacieron tan grandes como se observan hoy, pero recibieron una inyección de material extra en algún momento que les alargó la vida.